Hace unos meses realizamos un viaje a la vecina isla de Puerto Rico para apoyar la primera versión del “Caribbean Drift Bash” pero una de nuestras reales intenciones era de por fin conocer el auto de William “El Sato”, un gran amigo que desde hace mucho tiempo habíamos compartido gracias a la magia del internet.
En Puerto Rico cuando dices “Drift” es normal que escuches mencionar al “Sato” en la misma oración, durante años ha crecido junto a sus diferentes AE86s como uno de los pioneros del Drift en la bella “Isla del Encanto”.
El “Phoenix” hace honor a su historia y nace de las cenizas de sus dos últimos builds: el Lady 86X y el #86.
Este 86 esta lleno de detalles, mas de los que podemos contar aquí, los aros son unos XXR 531, las suspensiones son BC Racing.
Bajo el bonete se encuentra la nueva evolución del phoenix y siguiendo con la familia toyota vemos este motor v8 1UZ que parece que salio de la fabrica con este AE86, o lo llamamos V86?
El 1UZ usa una transmisión W58 de Supra 86 la cual esta conectada a un diferencial de Celica con una relación 3.72 y ejes WEIR Performance.
El interior es minimalista justo como nos gusta, cuenta con lo necesario para disfrutar y sacar el mejor provecho del auto.
Al principio no nos gustaban mucho pero luego de un buen rato de verlo en persona, los custom square headlights si que hacen la diferencia.
Al igual que sus anteriores builds, el Phoenix se usa para lo que esta construido y eso es para “darle en la madre”, sus battle scars no nos dejan mentir.
Otro de los toques interesantes en su exterior es este custom “widebody” en el frente, realizado al cortar y extender la parte central del guardalodo y así lograr el efecto “wide”.
Delante son unos 16×9 envueltos en gomas 195/45.
En la parte trasera unos overfenders permiten que los XXR esta vez en 16×9 con gomas 205/45 se sientan como en casa.
Ver al Phoenix y al Sato juntos nos recordó el porque tenemos esta gran pasión con los autos, es simple, esa estrecha relación entre el hombre y la maquina solo la conoce uno mismo y no hay forma de describirla.
Sus 6 años trabajando con la plataforma hachiroku sin duda no son en vano, dicen que con la experiencia también viene la perfección y queda demostrado con el Phoenix.
Sabemos que no importa lo que pase con el Phoenix, la pasión y dedicación que refleja el Sato por el drift hará que este auto vuelva a resurgir desde sus cenizas no importa cuantas veces sea necesario.
Es realmente un placer conocerlos a ambos y esperamos verlos pronto.
Efra.